Gestos















Cuando nos referimos al gesto, nos estamos refiriendo a cualquier movimiento que realizamos con el rostro, las manos o cualquier otra parte del cuerpo con el que expresamos o transmitimos mensajes. Le hemos dado tanta importancia, que hay toda una literatura sobre los comportamientos gestuales, sean éstos realizados de forma consciente o inconsciente; asegurando algunos estudios que este lenguaje gestual relata en verdad quiénes somos, lo que sentimos en ese momento y nuestros verdaderos gustos. Nuestro control sobre los demás está llegando hasta tales límites, que no hace falta que nadie abra la boca para saber como es. 

Lástima que ese control tan exhaustivo sólo lo apliquemos como signo de poder y hegemonía sobre los demás. Poco orientamos nuestras miradas para entender los gestos que la Naturaleza, cada vez de forma más evidente, nos muestras ante los abusos que estamos cometiendo y que está poniendo en peligro la vida sobre la Tierra. Los científicos, quienes son los que se encargan de descifrar el lenguaje gestual del planeta, nos advierten constantemente cuales son los gestos más claros sobre los atropellos cometidos. Pero a nosotros nos da igual, seguimos relativizando dichos gestos, y otros incluso hasta los niegan. ¡Allá ellos!

Este comportamiento gestual no es exclusivo de la condición humana. Los animales tienen su lenguaje verbal, a bases de chillidos, silbidos o guturales para comunicar o advertir de cualquier situación que se pueda producir. Pero además, cuentan con un lenguaje gestual que, al igual que el de los humanos, transmite mensajes al resto de los individuos que conforman su manada o grupo.

Lenguaje verbal y gestual que, muchas veces, son la conversación transcendental entre quienes tienen animales de compañía. Esos maullido lastimero de nuestro gato; el ladrido de advertencia de nuestro perro, el nerviosismo ante la llegada del cuidador, la quietud casi marmórea ante la vigilancia ¡Cuánto sabemos de perros y gatos!

En la Naturaleza, el restos de animales también cuentan con un extenso repertorio de lenguaje verbal y gestual menos conocido. Berrean cuando quieren llamar la atención o buscan a otro individuo; silban cuando captan que puede haber un peligro cercano; espurrean cuando advierten la presencia de algo extraño que no pueden identificar;…etc.etc.

También cuenta con una serie de gestos conscientes o inconscientes con los que nos muestran sus estado de ánimos. Se quedan inertes mirando fijamente en una dirección concreta, levantan la cola, sacan la lengua, miran amenazante a esa cría incordiosa, …..etc,etc  o simplemente hacen muecas. Estas fotos son sólo un pequeño repertorio del lenguaje gestual con el que cuentan.