Bufalaga marina (Thymelaea hirsuta)














Nos encontramos ante una de esas plantas tan desconocida como importante antaño, al ser utilizada para un sinfín de remedios y usos. Al igual que otras plantas mucho más conocidas: manzanilla, salvia, tomillo…. la bufalaga ha sido aprovechada desde sus raíces hasta sus hojas. Pocos serán los que tengan conocimiento de esta planta y de su aprovechamiento, aunque actualmente parece que ya se están fijando en esta planta al atribuírsele a sus extractos una actividad antitumor, antioxidante y antimicrobiana. ¿ Será su renacer como planta importante, o su desaparición por su sobreexplotación? En este mundo donde todo se mide por su rendimiento económico, todo puede suceder.

Como buena planta mediterránea, está acostumbrada a maximizar el poco agua que le brinda el medio donde vive y toda la luz que le aporta el sol en esta parte del planeta; y  nos lo agradece mostrándonos sus tonos verdes durante todo el año,; teniendo además la singularidad de florecer durante los meses de invierno, por lo que le devuelve a la naturaleza lo que recibe de ella, en forma de néctar de sus flores aportando ese alimento tan necesarios a los insectos circundantes, en una época precisamente de escasez.

En nuestros Acantilados se puede observar en una pequeña franja costera, muy cercana al mar, aunque también es posible ver ejemplares algo alejados. No es una planta muy abundante por estos parajes, debido quizás a que nuestros Acantilados contaban con muchas caleras dispersar por todo su entorno, y las caleras necesitaban mucho combustible para la producción de cal, y una de las utilidades de la madera de la bufalaga era para leña de los hornos. 
Los ejemplares cercanos al mar, parecen atrapar la sal del mar entre sus hojas, por lo que es curioso observar plantas recubiertas de sal; pareciendo como si la planta supiera de la importancia que la sal ha tenido para conservarlos alimentos, y ella quisiera aprovecharse de esa propiedad, en un medio tan hostil.

Así, que audaz caminante que te adentras por todos los rincones de estos pequeños Acantilados, quizás te tropieces con una planta algo singular de numerosos nombres: boja marina, bufalaga marina, palmera, pala marina, boalaga,…….. no te trastornes ante su presencia, sólo ten presente que cualquier planta por insignificante que te parezca, tuvo momentos de mayor esplendor, aunque a ti te parezca un simple matojo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario